miércoles, 7 de octubre de 2015

EL DISFRAZ DE TOM

EL DISFRAZ DE TOM

Capítulo 1: De casa a la isla

Los días de lluvia no resultaban un problema para Tom. Imaginación y disfraz en mano era todo lo que necesitaba para convertirse completamente en un personaje de cuento. Así pues, aquella tarde no fue menos. Tras haber engullido de un solo bocado el pan con chocolate que le había preparado su mamá, corrió a su habitación a estrenar su nuevo traje.Los días de lluvia no resultaban un problema para Tom. Imaginación y disfraz en mano era todo lo que necesitaba para convertirse completamente en un personaje de cuento. Así pues, aquella tarde no fue menos. Tras haber engullido de un solo bocado el pan con chocolate que le había preparado su mamá, corrió a su habitación a estrenar su nuevo traje.


Esta vez sería Peter Pan durante toda una tarde. Se enfundó sus mallas verdes oscuras, se puso la camiseta y el gorro del mismo color, y por último unas preciosas y cómodas zapatillas. Frente al espejo contempló lo mucho que se parecía a su personaje favorito de cuento.

De repente, algo comenzó a brillar. Un estela de luz le envolvió de pronto. Asustado por no saber qué ocurría, comenzó a llamar a su mamá:
̶ ¡¡¡Mamá, ayúdame!!! ̶ gritó el pequeño.

Pero antes de que su madre pudiera ir a ver qué pasaba en la habitación, Tom fue tragado por aquel haz de luz e,  inmediatamente, teletransportado a otro mundo.

Habían pasado tan sólo unos segundos, aunque para él hubieran parecido días. Miró a su alrededor y se dio cuenta de que no se encontraba ya en su cuarto. Nada podía reconocer en aquel lugar. Ni su cama, ni sus juguetes, ni siquiera podía ver a su gato Spike ronroneando a sus pies. ¿Dónde se encontraba?

Lo único que seguía siendo igual era su traje, seguía portando su disfraz de Peter Pan.

Un momento... ¡se encontraba en una isla! Corrió tanto como pudo por la orilla, intentando que las olas no mojaran sus nuevos zapatos. A lo lejos, divisó un grupo de niños. Entonces, no dudó en que ellos podrían ayudarle a volver con sus papás.

̶ Hola, ¿podríais ayudarme? ̶ saludó Tom a uno de los chicos, que se encontraba sentado en una roca con los demás ̶ . Creo que me he perdido y no sé cómo irme de vuelta a mi casa.

̶ Pero Peter, ¿dónde estabas? Te estábamos esperando ̶ exclamó una niña rubia.


                   MARTA MORALES


2 comentarios:

  1. Está muy bien, muy cómodo de leer, redactado con inocencia y sencillez. ¿Es un proyeco de cuento infantil o algo parecido? No lo digo porque crea que te expreses como una niña de párbulos jejeje
    Es solo curiosidad científica. Y también por saber en qué posición quedo si no entiendo algo del capítulo jejeje
    Está genial, de veras. He empezado a sudar por la tensión al intentar que no me malinterpretaras jejeje
    ¡Un abrazo! :)

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  2. ¡Hola! Sí, era un cuento que nos han pedido como tarea en la universidad, estoy haciendo Magisterio Infantil. Muchas gracias! Me alegro mucho que os haya gustado, un abrazo

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